Roma

En este texto, el autor escribe sobre sus ideas de un viaje tranquilo. Para ser sincero, el tipo de viajes que a mi no me entusiasman demasiado. Personalmente, soy de aquellos que, si viajan, es para visitar y conocer lugares nuevos.
Un buen ejemplo es Alemania. En mi opinión, es un gran país, lleno de historia (puede que una historia muy turbia, pero al fin y al cabo muy interesante) y con ciudades espectaculares. Además, es un sitio inmejorable para vivir, dada su situación económica frente a otras superpotencias.
Pero, sin duda, el lugar al que iría sin pensármelo dos veces, ese sería Japón. Es mi sueño desde hace unos años, a donde debo ir como mínimo una vez en la vida. Un país que mezcla a la perfección últimas tecnologías con tradiciones milenarias impresionantes, representadas con templos o estatuas. Es una región idílica y tranquila, la cual tiene los niveles de delincuencia más bajos del mundo, en la que la paz no es una utopía tan alejada de la realidad.
Pero si tuviera que buscarle desventajas, es que sus habitantes, aun siendo muy amables, son también un poco solitarios y reservados. Además, tienen todavía muy arraigadas sus tradiciones más conservadoras, sobre todo de la familia: según que casos, que un padre esté orgulloso de su hijo es un arduo trabajo.
En definitiva, un viaje tranquilo, hay en todas partes. Pero, aunque muchos disientan de mi opinión, estos lugares son los que a mi respecta, los mejores para un poco de turismo.